Los usuarios de Windows 11 y 10 se han visto afectados por un bug que afecta a aquellos con GPU Intel y que provoca que los juegos (o cualquier software que utilice DirectX o Direct3D) se encuentren con errores y cuelgues.
Neowin (se abre en una nueva pestaña) informa de que Microsoft ha confirmado (se abre en una nueva pestaña) que las actualizaciones acumulativas de noviembre de 2022 (KB5019980/KB5019961 para Windows 11, y KB5019959 para Windows 10) causaron este problema. Para que quede claro, esto afecta a los PC que funcionan con gráficos integrados de una CPU Intel, no a los que utilizan una de las tarjetas gráficas Arc dedicadas de Intel.
Así que, si te has estado encontrando con un error DLL (apphelp.dll para ser precisos) que ha estado jugando con tu PC, ahora ya sabes la razón – pero lo importante a tener en cuenta aquí es que el error sólo afecta a las versiones más antiguas de controladores gráficos Intel.
Microsoft nos dice que el problema afecta a las versiones del controlador Intel 26.20.100.7463 hasta 30.0.101.1190, y que: «Este problema puede ocurrir de forma intermitente y afecta a aplicaciones que utilizan DirectX o Direct3D para renderizar parte o todo su contenido».
El gigante del software nos promete que está trabajando en una solución en este momento, y deberíamos recibir una actualización sobre cuándo llegará pronto.
Análisis: Controladores más nuevos, sin problemas
Al menos, según Microsoft, el error es sólo «intermitente», lo que significa que no tiene por qué producirse con tanta frecuencia, incluso si se está ejecutando una de las versiones mencionadas del controlador gráfico de Intel. Por supuesto, se trata de controladores antiguos, por lo que ya deberías haber actualizado a una versión más reciente.
Es importante mantener los controladores al menos relativamente actualizados porque, de lo contrario, podrías perderte importantes correcciones de seguridad. A medida que pasa el tiempo, es inevitable que se encuentren vulnerabilidades en el software y los controladores, y que algunos malhechores intenten aprovecharse de ellas. Por eso, las empresas tecnológicas corrigen los controladores y las aplicaciones sobre la marcha, por lo que siempre es una buena idea utilizar la última versión.
Los controladores de la GPU pueden ser un poco diferentes en algunos aspectos, ya que, por ejemplo, los niveles de rendimiento podrían bajar en tus juegos de PC favoritos con cualquier nueva versión del controlador (esto no debería suceder, pero sucede de vez en cuando, sobre todo con las tarjetas gráficas más antiguas). Así que, aunque los jugadores no siempre tengan la última versión de sus controladores, siempre que utilicen algo bastante reciente, deberían estar cubiertos.
En el caso de este error, estamos hablando de versiones de controladores de Intel que tienen al menos un año de antigüedad (o mucho más atrás), y en ese punto, es definitivamente el momento de que la gente busque un controlador más reciente. Esto demuestra que los controladores antiguos no sólo suponen un riesgo para la seguridad, sino que también son más propensos a sufrir fallos.