Al parecer, Microsoft ha dado marcha atrás en sus planes iniciales de interrumpir algunas generaciones de su software Office.
La compañía había planeado inicialmente terminar el soporte para Office 2016 y Office 2019 a partir de octubre de 2023, con los usuarios sin poder utilizar el software para conectarse a los servicios de Microsoft 365, incluyendo Exchange Online.
Sin embargo, las nuevas indagaciones de los expertos parecen sugerir ahora que hay mucho más de lo que se pensaba inicialmente, con algunas advertencias importantes que pueden seguir alarmando a los usuarios de Microsoft Office.
Confusión en Office
La noticia fue reportada por ZDNet (se abre en una nueva pestaña), que buscaba aclarar algunas confusiones sobre la vida útil de Microsoft Office 2016 y Office 2019.
Ya en julio de 2022, Microsoft reveló sus planes de cortar las conexiones entre el software y Microsoft 365 – pero ahora parece que esto sólo significa que la compañía en realidad sólo no apoyará estas conexiones en caso de cualquier problema o problemas, como el malware o el software inseguro.
Los usuarios no dejarán de conectarse a Microsoft 365 si tienen el software antiguo, pero la compañía advierte que pueden encontrar «problemas inesperados» si intentan hacerlo.
Ahora también parece que la fecha límite de octubre de 2023 solo se aplica a Office 2019. El software debe perder todo el soporte principal en ese momento, lo que significa que Microsoft ya no agregará nuevas características, parches o soporte de seguridad.
Pero esta falta de soporte también significará que la conexión a Microsoft 365 será problemática, ya que la compañía busca minimizar el riesgo de que cualquier ciberataque basado en la red se propague a través del software entonces obsoleto.
Todo esto significa esencialmente que, aunque los usuarios podrán seguir utilizando sus versiones antiguas de Office, podrían tener problemas para conectarse a Microsoft 365.
«En la práctica, esto significa que a medida que hagamos actualizaciones de Exchange Online, SharePoint Online y otros servicios de Microsoft 365, no construiremos en torno a las limitaciones inherentes a los antiguos clientes perpetuos de Office que ya están fuera del soporte principal», dijo Microsoft a ZDNet. «Los clientes no verán bloqueada su conexión, pero es posible que no obtengan todo el valor de las nuevas inversiones en nuestros servicios en la nube. Con el tiempo, pueden encontrarse con problemas inesperados».
Office 2016 ya se ha quedado sin soporte, que terminaba en octubre de 2020, por lo que ya están cubiertos por la aparente negativa de Microsoft a ayudar a conectarse a Microsoft 365 u otros servicios, algo que no mencionaba en el anterior comunicado.
La medida parece ser otra parte de los planes de Microsoft para que los usuarios se actualicen a las últimas versiones de su software lo antes posible. La compañía lleva tiempo intentando fomentar la actualización a Windows 11, aunque las últimas cifras de AdDuplex muestran que Windows 11 sólo se ejecuta en el 23,1% de los ordenadores.