Si te has encontrado con que aplicaciones como Twitteriffic y Tweetbot han dejado de funcionar, no ha sido por casualidad. De un plumazo, las aplicaciones de terceros para Twitter dejaron de funcionar a principios de este mes, haciendo inútiles los esfuerzos de muchos desarrolladores a lo largo de los años y destrozando su lealtad a la empresa.
Es otra línea en la historia de Elon Musk como dueño de la plataforma social desde finales de 2022, donde un montón de decisiones han sido fuertemente criticadas o revertidas, aparentemente dependiendo de cómo se sintiera ese día.
Sin embargo, esta decisión podría ser una de sus peores, ya que rápidamente destruyó cualquier buena voluntad que los desarrolladores tuvieran para la plataforma, y todo lo que la compañía ha hecho para reconocerlo, es un tweet innecesariamente misterioso que no puedes evitar pensar que proviene de una telenovela.
De la frustración surge la innovación
Twitter está aplicando sus antiguas normas sobre la API. Eso puede provocar que algunas aplicaciones no funcionen.17 de enero de 2023
Arriba se muestra el tweet que planteó aún más preguntas que su propósito de reconocer estas aplicaciones de terceros que se restringe el acceso a Twitter.
En aras de la transparencia, lo normal sería ver un enlace web a una página de soporte en la que se explicaran las normas y se explicara por qué se ha llegado a esta conclusión, pero no hay nada. Es una bofetada en la cara de los desarrolladores que han trabajado incansablemente en sus propias aplicaciones de Twitter para dar a los usuarios la posibilidad de elegir cómo querían leer su feed y redactar sus tweets, pero ahora se ven obligados a utilizar una aplicación oficial que se ha vuelto más inestable desde que Musk redujo la plantilla de la plataforma, haciendo que equipos como el de prensa sean inexistentes.
Una vez más, no nos queda más remedio que rascarnos la cabeza y preguntarnos si veremos otro tuit en un futuro próximo para revertir la decisión o explicarla con tuits más crípticos, como un estado de Facebook de la época de 2008 que tiene grandes vibraciones de ‘I’ll inbox u hun’.
Es una pena enorme ver cómo uno de los mayores activos de Twitter, tanto en buena voluntad como en innovación por parte de los que no pertenecen a la empresa, arde en llamas de golpe. No es la forma de hacer las cosas, de ninguna manera. Desde el patio de recreo hasta una reunión en la oficina, simplemente no se hace.
Sin embargo, esto también espolea las alternativas, como Mastodon e incluso Instagram. Icon Factory, responsable de Tweetbot, centra ahora su atención en un cliente de Mastodon llamado Ivory (se abre en una nueva pestaña). Ya tiene muy buena pinta y esperemos que, con el tiempo, la plataforma atraiga a más usuarios.
Esto es lo único positivo que se puede sacar de todo esto, pero no debería haber acabado así.